El edificio es precioso. Es antiguo, es encantador, pero necesitarĂa una buena reforma y adecuarlo a lo que debe ser un alojamiento turĂstico. No me pareciĂł de recibo que para 4 dormitorios para unas 18 personas solo hubiera una ducha y dos WC en la misma planta. Y un par de cada mĂĄs en la planta baja, a la que se accede por una escalera empinada y sin protecciĂłn en caso de lluvia. Las ventanas de mi habitaciĂłn no cerraban bien, e incluso una no tenĂa ventana, solo contraventana, lo que hacĂa que entrara aire y ruido. El desayuno bien, completo... pero servido en unas mesas corridas casi sin espacio para pasar entre ellas o acceder a algunas de las sillas.
En la habitaciĂłn solo dos literas tenĂan un cajĂłn que podĂa cerrarse con candado. El resto de las camas tenĂan mesillas o banquetas haciendo el papel de mesillas. Pero no habĂa mĂĄs armarios.
Estå en una zona peatonal. (eso no lo he visto en la web. Me enteré al llegar al lugar)
Lo dicho: el edificio es muy bonito, pero no estĂĄ como se ve en las fotos. El deterioro es mĂĄs evidente.